Me he decidido a actualizar este blog... por que... !Estamos estrenando año! =) Sehhh FELIZ 2008 princesas!!
Buee... el título del post... es porque hoy he querido contarles un poco más de mi...les aburrirá, lo sé xD pero en parte lo hago para desahogarme a mi misma...
Ustedes ya saben que comencé con esto de la anorexia a la edad de 14 años, casi 15, de manera inconsciente y podría decirse que 'inocente' con el simple motivo de que mi vestido de XV me quedara lindo... Pues bien, por la motivación de la fiesta, y la prepa, amigos nuevos, vida nueva, etc etc, me resultó demasiado fácil bajar de peso. De repente la niña rellenita se había ido para dar paso a una delgadísima yo. Disfruté enormemente mi triunfo. La gente no paraba de decirme lo delgada que estaba. Pues bien...
Mi alegría no duró mucho... Más o menos, en 2º semestre fue cuando comencé a decaer, cuando se acabó la 'felicidad'. No sé con certeza a qué se debió la enorme inseguridad que de improviso me atacó, o la terrible ansiedad que me desesperaba y hacía atragantarme de galletas y leche todo el día. Como se imaginarán destruí poco a poco (muy lentamente, para suplicio mío) mi delgado y bien formado cuerpo. Dejé de hacer mis ejercicios. Me importó un comino si tal alimento era de gran contenido calórico. Caí en una terrible desesperación.
En parte pudo deberse a las constantes riñas entre mis padres, a la terrible soledad que experimenté (pues me di cuenta que aunque ahora muchos de los chicos de mi prepa gustaban de mi, sólo me querían por mi físico, ni siquiera se interesaban en conocerme) o incluso pudo ser por la presión de mis amigas... Sé que está mal decirlo de mi parte, pero estoy completamente segura de que a mis espaldas hablaron (o hablan) mal de mi. Sé que me odian, porque me envidian... Como sea, ahora ya no tienen nada que envidiarme, el hermoso cuerpo que poseía lo he perdido por mis arrebatos. Ahora podrán estar felices, y cuchichear de lo gorda que me he puesto ¬¬ whatever !.
No sé si comprendan mi patética y actual posición xD... ya saben, pasar de ser linda, a ser... esta cosa amorfa que hoy soy. De ser una chica delgada, a la que cualquier prende le quedase linda, a ahora pasar horas lamentándome frente al espejo, irritada porque no me entra tal pantalón que antes me resbalaba, o que con tal blusa se me nota la panza... Dios... Cuántas veces no perdí muchas clases por no poder quedar conforme con mi imagen... Cuantas veces no me vi, atragantándome de cereal, o cualquier carbohidrato sin parar, hasta dolerme el estómago...
Y luego... cuando quise salir del hoyo, mi padre comenzó con sus comentarios hirientes: "Estás gorda... y la verdad se nota mucho" "¿Estás engordando?" "Te veo más gorda. Te ves diferente"
Para colmo... estos comentarios paternos se contrapusieron contra los de mi madre, la cual, aún actualmente no para de decirme: "Ve que flaca estás. Come, come más!" "Te vas a morir. No vas a poder estudiar de debilidad, tienes que comer más"
Obvio que mi padre era el realista y mi madre... digamos que, o ella no tiene una buena percepción, o la definición de "sana" para ella, es que yo esté con sobrepeso. A veces no la entiendo... aunque no debería tratar de hacerlo, es duro, pero la verdad es que ella es una mujer depresiva, que tiene sobrepeso, ciertamente...
Como sea. Ahora estoy más lejos que nunca de mi meta.
Y sé exactamente lo que debo hacer, cuanto antes, mejor. No tengo nada que me lo impida ahora, solo estoy yo...
